miércoles, 4 de febrero de 2009

Historia de Nuestros Labradores: Doncella


Ella, es la mayor de nuestras niñas, aunque en realidad no lo parece, porque tiene más energía que el más juguetón de los cachorros… Mi esposo la compró para que Aquiles estuviera siempre acompañado. La primera vez que la vio estaba ella solita enfrentándose a 4 de sus hermanos, así que desde el primer momento demostró gran valentía!... fue la única hembra amarilla de la camada, la mayoría de sus hermanos fueron negritos, así que resaltaba la bolita clara brincando entre todos los demás… Cuando vio al Aquiles fue amor a primera vista, ni siquiera porque ella estaba muy pequeña y Aquiles ya era todo un labrador de un año se sintió intimidada, al contrario, desde que lo vio empezó a jugar con él y hasta la fecha adora estar a su lado…

La verdad es la que más dolores de cabeza nos ha ocasionado, en pocas palabras es TREMENDA!.... este año cumplió dos años y apenas hasta ahora como que está madurando, obedece más, está más tranquila… pero claro su espíritu rebelde sale a la luz de vez en cuando..

Doncella tiene una fijación enorme por su PELOTA!.... las ama!!… siempre trae una consigo y cuando por alguna razón la olvida encuentra algo semejante, ya sea una naranja, un limón, o cualquier cosa redonda con la que pueda jugar. La mayor parte de las veces duerme con una pelota al lado y en cuanto ve a alguien lo primero que hace es invitarlo a jugar con ella… la verdad es muy gracioso y divertido!! aunque agotador!!

Doncella ha sido una gran compañía, su energía siempre se transmite, no puedes estar a su lado sin reírte de o con ella, la verdad la queremos mucho y no me imagino la vida sin ella!!!...

Además, ha sido una gran madre sustituta para Cocoa!

Los papás de Doncella:
Shiva y Max

Historia de Nuestros Labradores: Cocoa


Ella llegó de una manera inesperada para realizar uno de mis más añorados sueños… tener un labrador chocolate!!!... la verdad me encanta el labrador en todos sus colores y Aquiles y Doncella son hermosos ejemplares amarillos, pero el chocolate siempre había sido una ilusión para mí, quizá por la rareza o la dificultad para encontrar uno que pudiera pagar!!!…

Un día navegando en internet encontramos un anuncio de labradores chocolates aquí en Hermosillo, así que decidimos ir a verlos… desde el primer momento nos encantaron!!! Y casualmente conocíamos a su mamá porque asistía a la misma veterinaria a la que llevábamos a nuestros labradores, así que creo que desde ese momento sentimos a Cocoa como parte de nuestra vida…

Al principio lloraba mucho porque nos la entregaron de casi 3 meses y ella ya estaba muy acostumbrada a su antigua casa; sin embargo, fue muy curioso ver cómo nuestros labradores la recibían…. estaban Aquiles, Doncella, y uno de sus cachorros al que aún no le habíamos encontrado hogar, y entre los tres la traían loca!!.. al poco rato estaban los cuatro jugando y conviviendo como si siempre hubieran estado juntos, debo reconocer que fueron ellos quienes la integraron a la familia…

Como llegó cuando Doncella acababa de tener perritos, creo que entre ellas se formó un gran vínculo, parecen madre e hija… y siempre lo que Doncella ladra… es ley para mi Cocoa… aunque en realidad es muy obediente con todos… y sumamente cariñosa… lo cual a mi me fascina!!... siempre sabe cuando estás triste o feliz y me ayuda mucho a mantener arriba mi ánimo… Es una mitotera, se la pasa asomada por las ventanas de la casa… y le encanta sentarse en las sillas como una verdadera persona..

La verdad es que al labrador en general le encantan los niños y es muy bueno conviviendo con ellos, pero Cocoa en especial es super niñera… cuando escucha a los niños en el parque muere por salir con ellos, le encanta verlos y andar detrás de ellos… incluso a mi sobrinita casi podría decir que le enseñó a caminar… pues cuando andaba dando sus primeros pasos Cocoa se ponía a su lado para que se detuviera en ella y caminaba despacio junto a ella para que siempre tuviera de donde agarrarse…

La verdad esta hermosa mulata nos ha dado mucho más de lo que esperábamos, la queremos muchísimo y siempre alegra nuestras vidas!!!


Los papás de Cocoa:
Hershey y Choco